¡Ohlalá! Esta semana nos convertimos en pequeños chefs en el jardín Campanita. Cada nivel preparó platos deliciosos y disfrutó cocinando con entusiasmo, explorando sabores, texturas y colores.
Mientras cocinábamos, aprendimos a medir, mezclar y compartir, desarrollando habilidades motrices y de convivencia. Fue una experiencia llena de risas, descubrimientos y trabajo en equipo que nos permitió vivir la cocina como un espacio de aprendizaje y creatividad.
Sin duda, una jornada inolvidable que combinó juego, aprendizaje y mucho sabor.







